Nubes de humo místico me elevan. Son masas densas, que se pueden tocar. Si las miras son grises y difusas, si vuelves a mirar brillan con mil colores nítidos.
El humo me rodea y me arropa, me traspasa y me envuelve.
Comienzan a subir las nubes, conmigo en su regazo, primero despacito. Luego aceleran y el estómago me da un buelco, un cosquilleo vertiginoso.
Supero los altos edificios, las nubes más cercanas, las borrascas... y entonces... entonces lo veo todo desde arriba.
Lo he superado todo y lo veo todo bien claro y de colores.
Mientras de fondo se oye un piano y yo bailo con sus notas sobre la nube de humo.
Lo que antesme parecía todo se vuelve nada desde aquí arriba.
Lo insignifacante s vuelve enorme y lo negro, blanco.
El fluir de la gente se aprecia como un torrente de agua, si supieran la fuerza que tiene esa marea, si se vieran desde arriba como lo estoy haciendo yo...
Siento la infancia en mi piel con mi boca entreabierta saboreando el cielo, mis pequeñas manos se funden con el azul de la bóbeda mientras veo formas en mi caminar.
Las formas solo se ven en mi cabeza y mi cabello las tapa como secretos inconfesables.
Creo que son azules y verdes.
Entonces decido cerrar los ojos y sentir como las gotas suaves y redonditas se pasean por mi cuerpo ajenas a todo. Los pies fríos se calientan si los escondo entre la nube.
La nube es cómoda y aterciopelada. Te acomodes como te acomodes la postura siempre es la mejor.
Entonces las nubes, las gotas, os colores y yo nos quedamos dormidos, poco a poco y subiendo cada vez mas.
El humo me rodea y me arropa, me traspasa y me envuelve.
Comienzan a subir las nubes, conmigo en su regazo, primero despacito. Luego aceleran y el estómago me da un buelco, un cosquilleo vertiginoso.
Supero los altos edificios, las nubes más cercanas, las borrascas... y entonces... entonces lo veo todo desde arriba.
Lo he superado todo y lo veo todo bien claro y de colores.
Mientras de fondo se oye un piano y yo bailo con sus notas sobre la nube de humo.
Lo que antesme parecía todo se vuelve nada desde aquí arriba.
Lo insignifacante s vuelve enorme y lo negro, blanco.
El fluir de la gente se aprecia como un torrente de agua, si supieran la fuerza que tiene esa marea, si se vieran desde arriba como lo estoy haciendo yo...
Siento la infancia en mi piel con mi boca entreabierta saboreando el cielo, mis pequeñas manos se funden con el azul de la bóbeda mientras veo formas en mi caminar.
Las formas solo se ven en mi cabeza y mi cabello las tapa como secretos inconfesables.
Creo que son azules y verdes.
Entonces decido cerrar los ojos y sentir como las gotas suaves y redonditas se pasean por mi cuerpo ajenas a todo. Los pies fríos se calientan si los escondo entre la nube.
La nube es cómoda y aterciopelada. Te acomodes como te acomodes la postura siempre es la mejor.
Entonces las nubes, las gotas, os colores y yo nos quedamos dormidos, poco a poco y subiendo cada vez mas.
10 comentarios:
me encanta, bailar sobre nubes de terciopelo al compás de notas de piano aireado
un beso, misread
Muy bueno. Me encantan las cosas que pones aqui.
Un saludete
Tener los pies calientes en este tiempo es verdaderamente importante.
los poetas No necesitamos fumar marihuana... las letras nos llevan la éxtasis al escribirlas... en este caso al leerte.
Mariposas revoloteando en el estómago entre arcadas [r]evolucionarias y vómitos de son.risas :)
Bonita*
Pero cuando te das cuenta de que no puedes volver a bajar, la magia se rompe. Lo blanco regresa al negro, y los colores, se mueren.
Miau
no sabes la sensación de inmensidad y de paz que me da mirar al cielo
y a veces el cielo es un tú que sonríe
y a veces no (perdona si me excedí con aquello)
d
http://es.youtube.com/watch?v=tXOBqtFw4fc
Un saludo desde mi casa.
lo liviano asciende sólo por esencia de sí mismo...
Pero bueno, qué has fumado?, jajajajajajajaja!! es broma! Un texto precioso.
Besos selváticos.
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